Un recién llegado con un toque moderno.
La combinación del rojo, el negro y el marrón de los muebles de mi despacho (que en realidad es una mesa de comedor) conforma un escritorio encantador.
Sentada, la posición de 180° (para echar una cabezadita entre cada sesión de trabajo, necesitamos descansar en la jubilación) ¡AH! ¡AH! ¡AH!
Es fácil de montar, en todos los sentidos. El único inconveniente es que no se vuelca cuando te sientas encima. Pero eso es una minucia.
Y soporta mi 1m83 y mis 96,5KG sin inmutarse.
Estoy contenta con esta silla, pero la tendré con el tiempo.